04 octubre 2017

¿Cómo se componía un ejercicio masculino en 1975?

No han empezado todavía las finales del mundial y ya está siendo el más loco que se recuerda en años: Uchimura lesionado, pero no es el único (la subdivisión de la muerte), gimnastas quejándose porque las luces los deslumbran, el suelo roto y, por consiguiente, la repetición de una rotación entera... y yo sacándome el teórico del coche en un intensivo, porca miseria.





Y de Montreal a Montreal, y tiro porque me toca. Hoy vengo a contaros cómo se componía un ejercicio masculino según el código de 1975, el vigente cuando Andrianov se proclamó rey olímpico.


Para empezar, el ejercicio no se componía de dos partes como ahora (dificultad y ejecución), sino de tres más una. ¿Qué quiere decir esto? que tenía tres partes que se contaban siempre:


  1. Dificultad

  2. Combinación

  3. Ejecución


Y una que te podían o no dar los jueces: las bonificaciones. Estas, a su vez, estaban divididas en tres: riesgo, originalidad y virtuosismo.


Cada una de las partes tenía una puntuación máxima que podía alcanzar en el ejercicio. La suma de estas puntuaciones daba como resultado la nota de partida del ejercicio. Esta nota de partida significa que esa es la nota máxima que el gimnasta podía conseguir con su ejercicio; a partir de ahí, cada fallo iba bajando la nota (esto es parecido al sistema actual):



  1. Dificultad: 3.4

  2. Combinación: 1.6

  3. Ejecución: 4.4


Total: 9.4
¿Y esto qué es? Pues que si tu ejercicio tenía una alta dificultad, obtenías un 3.4 en esa parte de la nota, e iba bajando conforme la dificultad del ejercicio decrecía. Igual con la combinación y la ejecución. Las otras 6 décimas están reservadas para las bonificaciones (0.2 para cada una). Es decir, si los jueces veían tu ejercicio muy original te daban 0.2, si veían que habías asumido mucho riesgo, otras 0.2, y si les parecía que tu ejecución era inmejorable, otros 0.2, y esta era la manera de llegar al 10.


Cabe recordar que en salto la cosa no funcionaba así, sino que cada salto tenía su propia nota de partida, que iba hasta el 9.8. Las dos décimas restantes corresponían a la bonificación de virtuosismo.


Una vez sabemos qué partes tiene el ejercicio, vamos a hablar de ellas. La ejecución no tiene problema ninguno, funcionaba como funciona ahora. Las bonificaciones ya están explicadas, grosso modo. En cuanto a la combinación, es lo mismo que ahora llamamos composición. Cada aparato tenía sus propias normas, pero la combinación, básicamente te dice que el ejercicio tenía que tener elementos de todos los tipos (vuelos, básculas, giros...), así como cuántos de cada debías incluir.











Fuente: código de puntos, 1975



La cosa se pone difícil con la dificultad (esto pretendía ser un chiste). En el código existía una tabla de elementos similar a la actual (evidentemente, mucho menos prolija). Sin embargo, en lugar de estar ordenados de la A a la H, estaban divididos en partes A, B y C; con un valor de 0.2, 0.4 y 0.6 puntos respectivamente. Repasemos:


  • Partes A: 0.2 puntos

  • Partes B: 0.4 puntos

  • Partes C: 0.6 puntos


 
Cada ejercicio debía tener un total de 11 elementos, como mínimo:


  • 4 A, 5 B  y 1 C en las finales por equipos

  • 3 A, 4 B y 2 C en las finales individuales

  • 2 A, 3 B y 3 C en las finales por aparatos



Pero, ¿qué pasaba si no llegabas a ese mínimo? Que te deducían el valor de la parte que te faltaba, es decir, 0.2 por cada parte A que no hicieras, 0.4 por cada B y 0.6 por cada C.


No obstante, estas partes podían compensarse entre sí: así, si te faltaba una parte C pero tenías partes A y B de sobra como para llegar a 0.6 (y con de sobra me refiero a que, a parte de las obligatorias, hicieran más), te perdonaban el elemento C y te daban los 0.6 con los elementos A y B.


Las partes B y A se compensaban con partes C de sobra, pero las partes B no podían compensarse con partes A. Pero, amigo, esto tenía una penalización: si te faltaba una parte C te deducían 0.2 adicionales, por lo que realmente solo estabas recuperando 0.4.


Además, las partes C obligatorias tenían que ser de un grupo concreto que las normas estipularan (vuelo, impulso, fuerza...), si no, conllevaba una penalización en el apartado de combinación.


Y ahora, vamos a rizar el rizo. ¿Qué pasa si te digo que no todas las partes A valían lo mismo entre ellas, ni las B, ni las C; sino que estos valores son el máximo que cada elemento podía alcanzar? Esto quiere decir que las partes A podían valer desde 0.01 hasta 0.2, las b desde 0.21 hasta 0.4 y las C desde 0.41 hasta 0.6.


Y sabiendo todo esto, si para entonces no te había explotado la cabeza, componías tu ejercicio y a competir. Para desembotarnos un poco, vamos a poner el mejor ejemplo posible, otro día veremos cómo se componía uno femenino:

 



[youtube=https://www.youtube.com/watch?v=Nq8vTWTvTlc&w=320&h=266]

Bibliografía:

F. I. G., Código de puntuación masculino (edición 1975)

No hay comentarios:

Publicar un comentario