Lo que el equipo te quita... (I)
12:28
Señores, la gimnasia masculina está que arde en Doha.
Seamos sinceros, viendo en la clasificación que Verniaiev no estaba bien, que Uchimura no iba a competir en el concurso general y que Medvedev
se había lesionado en salto, me esperaba de este mundial un Montreal
2.0, pero nada más lejos de la realidad, el nivel está altísimo y la
emoción por las nubes.
En la final por equipos participaron Brasil, Países bajos (ambos me resultaron una agradable sorpresa), Japón, Estados Unidos, China, Gran Bretaña, Suiza y Rusia.
Lo esperado era que China y Japón se disputaran el oro (más inclinada la balanza hacia el lado chino) y que Rusia hiciera de Rusia e intentara no perder el bronce a pesar de tener calidad suficiente para quedar por encima de los otros dos conjuntos.
¿Cuál fue nuestra sorpresa cuando en la primera rotación los chinos fallaron en suelo con un ejercicio de Xiao Ruoteng donde cayó al suelo en la doble pirueta y media? A esto le añadimos que Japón empezó en caballo con arcos y, aunque pudo defenderse bien, no es su mejor aparato. Rusia se aprovechó de la situación y ofreció tres buenos ejercicios de suelo y se colocó en primer lugar, justo por delante de Brasil, que comenzó en anillas, donde son fuertes, dejando a Japón quinta y a China séptima.
Aquí quiero hablar del suelo. Sospecho que han debido de encogerlo, porque no es normal que tantísima gente haya salido directamente fuera con ambos pies en alguna de las diagonales. Bromas aparte, también quiero loar la altura de las diagonales de Nikita Nagorny, cualquier día se nos da un cosqui con el techo del pabellón.
Otro gran ejercicio que nos mostraron en la primera rotación fue el de anillas del brasileño Zanetti, especialista y campeón olímpico en Londres 2012:
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A la memoria de Arthur Zanetti, murió ahogado por sus propios músculos (fuente: rtve.es/alacarta)[/caption]
En la segunda rotación Rusia pasó apuros en caballo con arcos; no hubo caídas, pero sí atascos que restaban fluidez a los ejercicios (uno casi al final de Kuksenkov y una apertura de piernas de Nagorny). Estos fallos los bajaron a la sexta posición. Japón se repuso en anillas y subió a la tercera plaza.
China comenzó su remontada haciendo gala de elegancia y paloescobismo en el caballo, es que da gusto ver a un chino en caballo con arcos; no obstante, a pesar de la buena rotación, no se movieron de la séptima plaza.
Quien tuvo una gran rotación y luego nunca más se supo fue Gran Bretaña en salto, que aupó a los ingleses a la primera plaza momentáneamente.
En anillas estuvo un poco mejor Rusia que China, pero dio gusto ver a ambos equipos. Y aquí quiero hacer un inciso para felicitar a la F. I. G. por intercalar los ejercicios de los dos países que comparten aparato, en lugar de competir primero los tres gimnastas de un país y luego los tres del otro. El caso es que, aunque ambos brillaron en anillas, Japón estaba en salto, y si el salto se te da bien te lanza la nota, y a Japón el salto se le da bastante bien.
Así pues, tras la primera mitad de competición teníamos a Japón primera, Rusia segunda, Gran Bretaña tercera, Estados Unidos (a lo zorro callado) cuarta, China quinta, Países bajos sexta, Suiza séptima y Brasil octava.
Llegó el turno del salto, qué gran rotación. Lin Chaopan salió con un López (Kasamatsu doble) muy bueno; los otros dos no pudimos verlos, pero intuyo que fueron otros dos López no clavados, pero sí muy buenos.
Nagorny con un Dragulescu absolutamente clavado, Dalaloyan un Yurchenko triple absolutamente clavado y Lankin con un Driggs (Kasamatsu pirueta y media) con un pequeño pasito.
Japón tuvo problemas en paralelas con un golpe de Tanaka, eso los bajó al tercer puesto y subió a Rusia al primero y a China al segundo.
Las paralelas fue otra rotación para que se nos cayera la baba, solo tuvimos que lamentar una caída de Dalaloyan nada más comenzar el ejercicio (un apoyo invertido en el que se pasó de fuerza y acabó cayendo). Pero, a cambio, vimos un 16.200. Sí, señores, una nota por encima del 16 con este nuevo código. ¿Su autor? Zou Jingyuan. Qué exquisitez, con una dificultad de 7 consigue una ejecución casi perfecta. Aún no hay vídeo de la final del mundial, pero aquí podéis verlo en el nacional chino:
https://www.youtube.com/watch?v=0DpE1CoX_5k
Así, China llegó a la barra con solo un punto de diferencia sobre Rusia. La barra es traicionera, porque puedes caerte y perderlo todo, por eso nos gusta que las finales se decidan en este aparato. Lin Chaopan y Sun Wei hicieron su trabajo, Beliavsky y Dalaloyan hicieron el suyo.
Xiao Ruoteng cerraba la competición para los chinos y una caída en el Liukin abría las puertas del oro a los rusos. Solo quedaba Que Nagorny no fallara. Y Nikita dobló los codos y no hizo la mejor barra de su vida, pero fue suficiente para recortar distancia y conseguir, por fin, el ansiado oro.
Mientras salía la nota, los rusos se abrazaban para felicitarse, los chinos lo hacían para consolarse. Y la nota salió y nos dejó a todos cara de tontos: un 13.733 que le daba la victoria a China por una diferencia de menos de 5 centésimas, por un mísero 0.049.
La cara de Nikita era un poema, la de Ruoteng un alivio, Rusia volvía a ser Rusia y China se llevaba el título.
[caption id="attachment_1035" align="alignnone" width="1000"]
Campeones (fuente: live.gymnastics.sport)[/caption]Tras el inesperado resultado, Valentina Rodionenko, nuestra bocachancla favorita, culpó a Artur Dalaloyan y su caída en paralelas de la derrota rusa. 0.049 puntos de diferencia puede dártelos cualquiera de los pequeños fallitos que todo hijo de vecino comete en una competición como esta, pero ella es feliz culpando a uno de sus chicos. Y el bueno de Artur debió de pensar lo mismo, viendo su desolación postcompetición:
[caption id="attachment_1034" align="alignnone" width="1179"]
Dalaloyan, desolado tras la final (fuente: @nzaccardi)[/caption]Bibliografía:
Resultados completos en la web de la F. I. G.
F. I. G., «Chinese men top Russia, Japan at Doha Worlds»
Imagen principal: @estelargimnasia
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